Los cereales integrales son aquellos, como trigo, arroz o maíz, que mantienen la capa externa del grano que comprende el salvado y el germen y que son ricos en aceites poliinsaturados, fibra, vitaminas del grupo D y minerales como el selenio o el zinc, pero también se denominan alimentos integrales a los derivados del pan y la pasta.
El alimento que es rico en fibra está hecho a base de harinas refinadas, sin el salvado, ni el germen, además de llevar añadido el salvado de un cereal”, matiza esta experta.

Sin embargo, “la utilización del término integral no está regulado, por lo que podemos encontrar panes que dicen llevar cereales integrales, o donde su componente principal no sea harina integral pero si sean fuentes ricas en fibra, gracias a que sumando sus ingredientes sume 3 gramos de 100, lo que representa el 6 % para la denominación legal rico en fibra.
Lo primero es comprobar en la lista de ingredientes que el primer alimento sea harina o sémola integrales, y no dejarnos llevar por el termino rico en fibra.
No obstante, no se debe renunciar a alimentos ricos en fibra ya que son beneficiosos y necesarios para la salud, pero sí se ha de prestar especial atención al perfil nutricional del alimento.
Es necesario informarse, porque algunos de los alimentos procesados hacen referencia al término rico en fibra o integral, pero su aporte de grasas saturadas o azucares no hacen recomendable su consumo habitual.
que interesante ha sido saber la diferencia, ¡muchas gracias por la información!